Tengo Fe en el  desarrollo de mi destino.

 

Estoy construyendo cada día el camino por donde voy a ir, mis pensamientos y mis sentimientos, me apoyan preparando lo que se llama  destino y soy yo mismo quien lo está pavimentando; es toda una constante construcción; en este camino encontrare muchas cosas que es posible no me agraden, como también cosas interesantes por conocer, sin embargo mi objetividad me mantiene en curso, sin alterar mi rumbo, más bien estas circunstancias que se aparecen me ayudan para continuar lo que yo me he trazado.

Palabras  que vigorizan mi afirmación:

Mis pensamientos tienen su propio fundamento, y son sólidos por convicción, y a la vez  flexibles por sabiduría, me dan la adaptación que requiero para construir cada paso que sirve para hacer mi destino, nada puede hacerme cambiar, mi objetivo está cada vez más claro, más claro el panorama, no importa donde me encuentre, solo sé que se cumplirá mi destino, porque estoy siempre con mis pensamientos.

En pocas palabras:

 

Cada paso que doy y de manera consciente se va construyendo  mi destino.